Hace apenas un mes, el 27 de octubre de 2023, tuvo lugar la reapertura de la gran obra que el maestro Ibarrola desarrolló en la localidad de Kortezubi, el Bosque de Oma. Un bosque pintado con colores y formas llamativas, que te da la sensación de caminar por un espacio natural que te observa a cada paso.
Hace años tuvimos la suerte de visitar en varias ocasiones el antiguo bosque, antes de que lo cerraran en abril de 2019 a cuenta de la enfermedad de sus árboles. Recuerdo la primera vez que lo vi, me fascinó ver como formas sin sentido cobraban vida cuando te situabas en el lugar correcto.
En cuanto nos enteramos de su reapertura reservamos fecha para volver con la peque. La casualidad ha traído la mala fortuna de que nuestra visita haya coincidido con el fallecimiento de Agustín Ibarrola, hace apenas un par de días.













Agustín Ibarrola, un artista de la naturaleza
Las obras del artista Agustín Ibarrola han estado muy relacionadas con la naturaleza, desarrolladas muchas veces en superficies como son las piedras o los árboles, y expuestas de forma permanence al aire libre en diversos lugares
¿Recuerdas haber visto unos cubos coloridos en Llanes? Son los “Cubos de la Memoria” y son de Ibarrola. ¿Y un bloque de mármol con un agujero en medio en la Plaza de la Virgen Blanca (la más céntrica) en Vitoria? Otra obra del autor llamada “La Mirada”.
Sus obras en la naturaleza no se han limitado a quedarse en la península. En la localidad de Ruhr, Alemania, se encuentra la “Colina de carbón Prosper Haniel”, pintado en árboles y rocas.
El Bosque de Oma, arte al aire libre
Pocas veces el arte nos da la posibilidad de formar parte del escenario como lo hace el Bosque de Oma. Este espacio te permite sumergirte en la naturaleza y sentir como el bosque está más vivo que ningún otro.
Más de 800 árboles pintados a lo largo del km y medio que ocupa el recorrido, formando parte de 34 conjuntos artísticos, que te obligan a moverte y buscar el punto donde convergen las líneas.

El recorrido marcado te lleva a seguir una ruta circular, donde cada punto está marcado con un número escrito en una pletina metálica en el suelo. Desde ese punto se alinean x árboles para formar esas figuras. Pero la obra cuenta con más árboles que forman figuras por sí solos.

Entrada al Bosque de Oma
Tienes dos formas de visitar el nuevo Bosque de Oma, de forma libre o en una visita guiada. La visita libre es gratuita y requiere reserva previa para controlar el aforo.
Las entradas para la visita guiada al Bosque de Oma para el 2023 tiene un coste de 10€ la entrada general, 5€ la entrada reducida (menores de 26 años, mayores de 60 y condiciones especiales, como desempleados o familia numerosa), y gratuita para los menores de 12 años y profesores.
Las entradas hay que validarlas en la caseta situada en Santimamiñe 1 hora antes de la visita, ya que se encuentra a 2,8km del parque y más o menos se tarda en llegar hasta allí entre 45 y 50 minutos. Desde la caseta te indicarán cómo llegar al nuevo Bosque de Oma. La reserva se hace en este enlace.
Para la visita por libre no hay límite de tiempo para estar allí. Nosotros tardamos unas 2 horas en verlo porque paramos a hacer muchas fotos, pero calculo que en hora y media se puede ver tranquilamente.
Encontrarás más información en la página web de Bizkaia Turismo.

Recomendaciones para visitar el Bosque pintado de Oma
- Llevar calzado deportivo: estás en un bosque y es fácil encontrarte con algo de barro, más si ha llovido en los días anteriores.
- Lleva agua: no hay fuentes en todo el recorrido.
- Los perros son bienvenidos: puedes ir con tu perro, recuerda llevarlo atado y recoger sus kks para que el siguiente que venga no la pise.