Nos encontramos en Oñati, un precioso pueblo gipuzkoano situado en el Alto Deba, el más extenso de la provincia. El pueblo está repleto de monumentos para visitar como el Santuario de Arantzazu, la Universidad renacentista de Oñati o el Molino de San Miguel, además del Casco Viejo, parada obligatoria para tomar unos buenos pintxos. En esta visita nuestra atención está puesta en la Cueva de Arrikrutz, Es una de las últimas cuevas que hemos visitado y, si como nosotros eres amante de estas formaciones, te enganchará desde el primer minuto.

Visita a la Cueva de Arrikrutz
La visita empieza en el Centro de Interpretación de la Cueva, situada en el mismo punto de recepción de los visitantes. Allí encontrarás una exposición permanente que sirve como perfecta introducción a la zona, con datos históricos, topográficos y representaciones de varias osamentas.



Arrikrutz se encuentra en terreno kárstico y a lo largo de los años ha sido esculpida por el Río Aldaola, dejándonos más de 14kms de galerías. Es la cueva más extensa de Gipuzkoa y en la actualidad el río sigue atravesándola de forma subterránea.
Tiene gran importancia a nivel espeleológico, arqueológico y paleontológico. Es una de las más completas que hemos visto, con gran diversidad de espeleotemas como son las grandes excéntricas, esas formas casi imposibles que las hacen tan llamativas. Nos ha llamado la atención ver cantos rodados en las paredes, no es la primera vez que los vemos en una cueva pero siempre es curioso comprobar de primera mano lo que el río ha dejado a su paso.






En esta cueva se han encontrado un gran yacimiento de osos cavernarios, restos de ciervos gigantes y rinocerontes lanudos. Pero el descubrimiento más importante ha sido el del esqueleto más completo de león cavernario, del que te hablo más adelante y que fue por lo que la conocimos nosotros.
La visita tiene lugar en la denominada “Galería 53”. Tiene una duración de 1h donde recorres 500m hacia el interior y 50m de altura dividida en 6 niveles. Es imprescindible reservar (puedes hacerlo online pinchando aquí).
Tendrás que presentarte en el Centro de Interpretación al menos 15 minutos antes de la visita. Desde el Centro hasta la entrada de la Cueva tienes un paseo de unos 5-10 minutos, y antes convendría ver la exposición por si el centro está cerrado cuando acabes la visita.
Espeleología para todos los niveles
Además del recorrido que te he mencionado, la Cueva de Arrikrutz te ofrece la oportunidad de vivir en primera persona una experiencia diferente a través de 2 visitas hechas a medida de cualquier visitante.
Espeleotxiki: destinada para público joven y familias, este recorrido es accesible desde los 6 años. Recomendable para que los peques vivan una experiencia emocionante en el mundo subterráneo. Tiene una duración de 2h y media.
EspeleoArrikrutz: un recorrido para mayores de 18 años que dura 3h y media. Recomendable si lo que buscas es una visita con algo más de adrenalina.



Para ambas salen fechas constantemente, la mejor opción es que llames o les mandes un email a arrikrutz@onati.eus y les preguntes. Si no te encaja ninguna fecha cuando les escribas, te apuntarán a una lista para avisarte cuando saquen nuevas fechas.
Historia del León Cavernario



Cuenta la historia que en 1966 Iñaki Zubeldia y Jesús Manuel Maroto, dos jovenes seminaristas de Arantzazu aficionados a la espeleología, pidieron ese domingo a su tutor 6 horas de descanso en vez de las 3 habituales para adentrarse en la Cueva de Arrikrutz. Se adentraron con un equipo muy precario como era costumbre, apenas un buzo y unas especies de antorchas hechas con periódico y cera. Encontraron el esqueleto de un animal que pensaron sería de un oso cavernario, algo que era común por las cuevas vascas, y pronto se dieron cuenta que estaban perdidos.
Pasaron las horas y sin comida ni luz se les hizo de noche. Pensaron que no saldrían de allí e incluso llegaron a tener alucinaciones donde oían ruidos de ovejas y camiones, según han relatado los protagonistas. Ya de madrugada los frailes consiguieron encontrarles haciendo sonar un cuerno de vaca que los dos jovenes confundieron con otra alucinación más. Su mayor sorpresa fue descubrir que no se habían adentrado en la cueva tanto como pensaban, sino que se encontraban a pocos metros de la salida.
Pero Zubeldia y Maroto no olvidaron el esqueleto. Siguieron investigando y volvieron a por una pieza dental que entregaron a Jesús Altuna, prestigioso paleontólogo por aquel entonces. Altuna certificó que el esqueleto correspondía a un león cavernario.



El esqueleto que encontraron es el más completo que se conoce de toda la península. Este león medía más de 3m de largo y 1,10 de alto, y pesaba alrededor de 350kgs, mucho más grande que cualquier león africano. Se sabe que los leones de las cavernas no tenían melena (o era muy reducida), ¿y sabes cómo? Gracias a los dibujos y grabados que nos dejaron nuestros antepasados en las paredes de las cuevas.
RECUERDA
Como amantes de estos entornos te pedimos que si te animas a visitarlas lo hagas de una forma responsable. Es muy importante para su conservación que el turismo que hagamos a estos espacios sea respetuoso.


