Todos los años, el 21 de Diciembre, en muchas localidades de Euskadi se celebra una de las mayores fiestas tradicionales, la Feria de Santo Tomás. Se trata de un mercado popular convertido en un día de fiesta, donde la comida y la bebida son el principal reclamo.
Después de 2 ediciones canceladas, se esperaba que este 2022 Bilbao volviera a salir a la calle. Y así ha sido. En su 73ª edición se notaba esas ganas por volver a disfrutar de este día.
Así empezó la Feria de Santo Tomás
Pero ¿sabes de donde viene la Feria de Santo Tomás? Hay que remontarse a mediados del siglo pasado, cuando los baserritarras se acercaban hasta las ciudades para pagar la renta anual de sus baserris.
Ya que tenían que desplazarse, aprovechaban para llevar sus productos y vendérselo a los vecinos que hasta allí se acercaban. Con el paso de los años, esta costumbre se consolidó en la Feria que conocemos a día de hoy, que celebró su primera edición en 1947.
Se eligió el 21 de diciembre por ser una fecha especial, el solsticio de invierno, el día más corto del año. A partir de aquí el sol renace y comienza un nuevo año pagano, lo que se denomina Eguberri en euskera. Esta celebración ha perdurado en el tiempo entre las tradiciones vascas, coincidiendo con la fecha elegida por la religión católica para celebrar las Navidades.
Qué hacer en Santo Tomás en Bilbao

Miles de personas se acercan cada año hasta la capital bizkaína para festejar este día. Para muchos, es el momento en el que comienzan las verdaderas Navidades en Bizkaia.
La jornada comienza a las 9 de la mañana y se extiende hasta las 20h, aunque muchos deciden seguir la fiesta por el Casco Viejo de Bilbao.
Aquí te dejo algunos consejos para disfrutar al máximo de este día:
- Pasear por las más de 200 casetas de productores que se instalan en el Paseo del Arenal. Entre los más solicitados destacan la sidra y el txakolí, queso, pan, verduras, miel, y dulces como el pastel vasco o las rosquillas de San Blas.
- Tomar un talo con chorizo o txistorra en una de sus txosnas. Este año estaban ubicadas en dos zonas: detrás del Arriaga y al final del Paseo del Arenal, en lo que llaman los tinglados.
- Comprar frutas, verduras y hortalizas traídas directamente de la huerta por agricultores locales.
- Probar txakolís y sidras con denominación de origen. Muchos de los productores ofrecen pintxos de queso o gildas por 1€.









Un año más la Feria de Santo Tomás ha llegado cargada con los mejores productos para llenar nuestras despensas. Si quieres aprovechar para hacer compras, te aconsejo ir a primera hora, cuando hay menos gente por las calles. Y si a la hora de comer te agobias con la cantidad de gente, a pocos metros tienes los bares del Casco Viejo, que te ofrecen una variedad increíble de pintxos.